Como un retroceso califican decisión del TSJ en materia de inquilinato
El vicepresidente de la Cámara Inmobiliaria del estado, José Ramón De Los Ríos afirma que con las marchas y contramarchas en materia de inmuebles, se declara la desaparición definitiva de viviendas para alquiler
Niurka Franco
La sentencia de la Sala Constitucional del TSJ emitida el pasado 17 de agosto, según la cual se suspenden las ejecuciones de desalojos forzosos en causas inquilinarias, constituye un retroceso frente al avance que se había logrado en 2014.
De esta manera lo expresó José Ramón de Los Ríos, vicepresidente de la Cámara Inmobiliaria de Anzoátegui, quien no dudó en calificar la medida de electorera, de cara a los comicios previstos para el 6 de Diciembre.
Y es que cuando la Ley para la Regularización y Control de Arrendamiento de Viviendas, permitió el desalojo de inquilinos en un lapso de seis meses, cuando incurrían en causas como incumplimiento del canon de arrendamiento, uso deshonesto del inmueble o cuando el dueñolo requería para ocuparlo ya fuera él o un hijo, se sintió un cierto respiro. Sin embargo, a juicio del dirigente gremial, con la nueva sentencia se dio un salto atrás.
“Con esta decisión se está decretando la desaparición definitiva de inmuebles para alquiler en el mercado. El gobierno no ha entendido que la gente necesita resguardar sus ahorros frente al alto índice de inflación que existe en el país, por lo que continuará la presión sobre el dólar”.
Estima que los más perjudicados serán los profesionales recién graduados y las jóvenes parejas, las cuales ante las limitaciones económicas propias de quienes inician, podían pensar en constituir un hogar, viviendo alquilados.
“Todas esas personas tendrán que esperar por los inmuebles que construya la Misión Vivienda, lo cual es positivo, ojalá que construyan muchas casas de interés social, pero en todo los países existen empresarios en el área de la construcción privada que desarrollan proyectos para quienes están en capacidad de invertir un poco más en un inmueble”.
Desde la perspectiva del vicepresidente de la Cámara Inmobiliaria, el panorama poco cierto y con reglas de juego que cambian constantemente, es lo que ahuyenta las inversiones. Cree que muchas familias sobre todo extranjeras, construían edificios para alquiler y vivían del arrendamiento, a la vez que aportaban soluciones a quienes al no contar con una vivienda propia, la rentaban.
Hoy eso es imposible, porque nadie quiere alquilar, pero tampoco desea que sus ahorros se erosionen por el efecto inflacionario, por lo que según De Los Ríos, continuará la demanda de dólares.