Fetranzoátegui: Aumento del 1° de mayo se esfumará como sal en agua
La Federación de Trabajadores de Anzoátegui sostiene que Maduro debe constituir un verdadero plan coherente y creíble para estabilizar la economía venezolana
Alexis Castillo
@alexisnoticia
Un panorama más desalentador es lo que presagia la Federación de Trabajadores del estado Anzoátegui (Fetranzoátegui) en el mes de mayo, una vez sea anunciado el tradicional ajuste de salario mínimo.
Lo estima así Tito Barrero, presidente de Fetranzoátegui, para quien el presidente Nicolás Maduro y sus colaboradores, no encuentran están lejos de constituir un verdadero plan coherente y creíble para estabilizar la economía venezolana y sentar las bases para su recuperación.
A su juicio un aumento salarial se esfumará “como arena entre los dedos”, porque el poder adquisitivo está rebasado por la alta inflación.
“Vamos a un empeoramiento del desempleo, del incremento del bachaqueo, del negocio oportunista, del comercio informal, de prolongar subsidios y no incidir en la producción y la creación de fuentes de trabajo estable y satisfactoria para la población”.
Torpezas gubernamental
Barrero fustigó la acción del gobierno de atacar más al empresariado privado que es el único que tiene capacidad para producir, “Qué pretende el gobierno con esta arremetida contra el empresariado, porque eso afecta a los trabajadores. Todos sabemos que el bloqueo económico contra las industrias alentará el desempleo y la inestabilidad laboral, eso es culpa del gobierno. Incurren todos los días en torpezas”.
El directivo recordó que las distorsiones de la economía nacional se agravaron desde el segundo semestre 2012, agudizada con alta inflación y la depreciación de la tasa de cambio no oficial.
“No auguramos bienestar el 1 de mayo con un anuncio de aumento, mientras no se corrija el rumbo económico en medio de una creciente restricción en la entrega de divisas al sector privado. Se suma además, que este año el promedio del precio del petróleo para Venezuela sigue a la baja”.
Barrero instó al gobierno a aceptar su culpa por el desabastecimiento de alimentos en vez de buscar a quienes acusar. “Cabe preguntarse dónde está la producción de las empresas expropiadas como las plantas de café, centrales azucareros, industria láctea y ahora exige que los demás suban su producción. El gobierno está obligado a frenar esta escasez crónica a nivel nacional y la escasez de bienes e insumos de toda clase, lo mismo que debe reorientar su conducción económica porque esto acarrea más pérdida de empleos.