Oneida Guaipe: hospital Razetti refleja la crisis humanitaria que vive Venezuela
La dirigente sindical del sector salud y aspirante a diputado suplente por el circuito 3 afirma que en 34 años de lucha en Anzoátegui, no había visto un repunte de enfermedades como la leishmaniasis, tuberculosis y paludismo en sectores urbanos
Niurka Franco
Por la necesidad de despartidizar el sector salud, ante la crisis humanitaria que existe en el país, se pronunció la dirigente sindical y aspirante a diputado suplente por el circuito 3 de Anzoátegui, Oneida Guaipe, quien asegura que el hospital Luis Razetti de Barcelona, es reflejo de la crisis humanitaria planteada por las sociedades científicas de Venezuela.
Guaipe, quien dijo tener 34 años en la lucha sindical desde el sector salud, asegura que esta área siendo la que mayor atención requiere, histórica y contradictoriamente, siempre ha sido la más desasistida, pero nunca como ahora.
Asevera que es muy preocupante lo que ocurre en la entidad, donde enfermedades que estaban erradicadas como la leishmaniasis, paludismo o tuberculosis han reaparecido con crudeza y ni siquiera en zonas rurales o apartadas, sino en zonas urbanas, al igual que la escabiosis, conocida comúnmente como sarna, la cual está causando estragos, ante la falta de agua y la escasez de jabón para la higiene personal y de medicamentos.
Advierte que se trata de una acumulación de problemas no resueltos. A su juicio, la partidización de la salud ha llevado a priorizar proyectos político partidistas, por encima de la salud para el pueblo, lo cual dice, ha quedado en evidencia en Anzoátegui con el gasto de miles de millones en un sistema de transporte inconcluso, “ solo por inaugurar a medias una obra en tiempo de campaña, en lugar de dotar el hospital Razetti o cualquiera de los hospitales del estado, donde los pacientes carecen de lo más esencial”.
La dirigente sindical adelanta que lo primero que deberá hacer la nueva Asamblea Nacional, será ocuparse de este problema, así como solicitar la interpelación del gobernador Aristóbulo Istúriz y del equipo de salud que le acompaña, para que aclaren a dónde fueron a parar los recursos aprobados para el área, mientras los hospitales de la entidad carecen de reactivos, de equipos, insumos e incluso de profesionales, porque la mayoría ha renunciado ante la imposibilidad de poder poner en práctica sus conocimientos, al carecer hasta de hilo para suturar una herida.
“Ellos tendrán que rendir cuentas del por qué un paciente en el hospital Razetti si no tiene teléfono celular con cámara no puede hacerse un placa o por qué en el hospital de niños los pequeños no cuentan con el número necesario de oncólogos para ser tratados”, dijo.