Anzoatiguenses afirman que la criminalidad se ha perfeccionado
El hallazgo de una mujer quemada y descuartizada en la zona rural de Barcelona comenzó a generar preocupación en los habitantes del área metropolitana, quienes aseguran que la impunidad ha potenciado el nivel de violencia
Juan Afonso
Con el hallazgo de una mujer quemada y descuartizada en la zona rural de Barcelona, la población anzoatiguense se estremeció cree que el hampa ha recrudecido en sus métodos de violencia, llegando a niveles nunca vistos al menos en Venezuela.
El otro caso que recorrió el país de punta a punta, fue el hallazgo de la cabeza de Rosalio Gamboa (27), alias "el roso". Dejaron esa parte de su cuerpo en la plaza Mirada de Pariaguán,al sur de Anzoátegui, para sorpresa de los habitantes de esa zona otrora apacible, pero hoy muy comentada por los hechos de violencia que se han registrado.
Al respecto, El Mercurio Web recogió algunas impresiones sobre estos hechos, y todas coinciden en que hay más peligro en las calles.
Uno de los primeros en opinar fue el desdempleado José Rojas, quien aseguró que este tipo de acciones no se habían visto en el estado. "Eso es espantoso, horrible. El crimen tomó niveles que no se habían visto antes. Siempre hubo hampa, pero jamás, en mis 55 años, vi tanta saña contra alguien".
El mesonero Luis Álvarez opinó que la forma en que ya ocurren los asesinatos ha empeorado. "Demasiada descomposición veo en eso. El que no se tomaran medidas de seguridad para evitar los asesinatos ahora degeneró en esta atrocidad".
"Es la segunda venida de Cristo"
Con tintes un poco más religiosos o espeirituales, hablaron al respecto dos amas de casa: Jeniffer Ruiz y Narlyn Rivas. Ambas damas alegaron que la poca compasión logra estos casos.
"Hay muy poco amor en la gente y poca cooperación con el prójimo", comentaba Ruiz.
"Sin ir muy lejos, tan solo ver a la gente en los autobuses dejando parados a los ancianos y mujeres embarazadas ocasiona que la gente se atreva a más. Llegamos a esto, lamentablemente", completó Rivas convencida de que la ausencia de valores y el poco temor de Dios hace que el hombre o la mujer actúe sin compasión y llegue incluso al homicidio y otros delitos.