Táchira bajo tensión por el cierre bombas de gasolina y el colapso por las lluvias
La medida fue justificada por el gobierno nacional, bajo el argumento de neutralizar el bachaqueo de combustible hacia Colombia
Caracas. Evely Orta
Crece la tensión en el Táchira luego que el Gobierno Nacional decidiera que las estaciones de servicio de los municipios limítrofes con Colombia se cobrará la tarifa internacional de 50 bolívares por litro.
Como consecuencia de esta medida las calles y avenidas de la capital tachirense están abarrotadas de conductores, quienes desde la madrugada hacen largas colas en las estaciones de servicio en busca de gasolina.
El diputado de la Unidad Homero Ruíz, explicó que las bombas a las cuales le impusieron esta medida, aun cuando pertenecen a los municipios limítrofes con el vecino país, no están ubicadas en la zona donde existe el tráfico de vehículos colombianos, por lo que su traslado es muy difícil por la distancia.
Entre tanto las estaciones de servicio de san Cristóbal, más de la mitad están cerradas y las otras están colapsadas por los conductores que intentan abastecerse de combustible, para obtenerlo están obligados a hacer colas de más de cuatro horas.
La medida fue justificada por el gobierno nacional, bajo el argumento de neutralizar el bachaqueo de combustible hacia Colombia.
A juicio del parlamentario tachirense el Ministerio de Energía Minas y petrolero antes de tomar semejante decisión debió hacer un estudio sobre el impacto y una consulta a la población tachirense.
Sin decretar emergencia por las lluvias en el Táchira
La emergencia que atraviesa San Cristóbal y otras poblaciones del Táchira es consecuencia del incumplimiento de las obras y trabajos hidráulicos por parte del gobierno Nacional y Regional.
Al ser consultado sobre la situación de la entidad por las lluvias, el diputado Homero Ruíz, indicó que esta situación se repite cada año ante la inoperancia de los organismos pertinentes, los cuales tenían que dragar los ríos y sanear las quebradas en la temporada de sequia.
Las lluvias han dejado poblaciones rurales aisladas tras 45 días de precipitaciones constantes, así como la vialidad de la ciudad de San Cristóbal, a pesar de esta situación dramática por demás, el Gobierno se ha negado a declarar la emergencia la entidad andina.