Los niños venezolanos en Brasil tienen 53 % menos de posibilidades de acceder a educación
«La inclusión e integración en otro país constituyen un proceso a largo plazo cuya efectividad requiere compromiso, recursos y un enfoque verdaderamente integral»
Redacción
Según un estudio, elaborado por el Banco Mundial y la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en el mes de mayo, los niños venezolanos que actualmente viven en Brasil tienen un 53 % menos de probabilidades de asistir a la escuela que sus compañeros brasileños.
En cuanto al sector educativo, tanto la niñez como la adolescencia en edad escolar se encuentran en desventaja frente a sus contrapartes de Brasil. Datos del censo educativo de 2020 revelaron que, apenas 37.700 niñas y niños de Venezuela, el 45 % se inscribieron en la escuela. Por otro lado, el 85 % de la niñez brasileña sí lo hizo.
Ante esta situación, el economista asociado de ACNUR Nikolas Parini, que participó en la elaboración del estudio, señaló que “la inclusión e integración en otro país constituye un proceso a largo plazo cuya efectividad requiere compromisos, recursos y un enfoque verdaderamente integral”.
Parini instó al Gobierno de Brasil a continuar implementando políticas que consideran las necesidades de las personas venezolanas en este país, como por ejemplo aumentar la capacitación lingüística de docentes, así como ampliar la capacidad de las escuelas en la Región Norte.
Para frenar esta situación, la ACNUR ha venido desarrollando un conjunto de actividades lúdicas para que los niños refugiados puedan educarse mediante el juego y la diversión.
Según Amanda Pérez de Superguapas, experta en juegos educativos y redactora para el segmento de Crianza Efectiva, este tipo de iniciativas son fundamentales, ya que en la primera infancia los juegos implican aprendizaje y estimulación. “Tanto el juego como los juguetes ayudan a niños y niñas a conocerse y a desarrollar su personalidad en áreas como la afectividad, la creatividad y la sociabilidad. En cuanto a los pequeños más necesitados, la Fundación Crecer Jugando ha comprendido esta importancia, de ahí que haya ganado reconocimiento en todo el mundo por haber repartido un total de 8 millones de juguetes en España y otros países de América Latina, África y Asia”.
Otro de los datos del estudio revela que la búsqueda de trabajo es uno de los grandes retos a los que se enfrentan las personas venezolanas obligadas a abandonar su país como consecuencia de la crisis económica.
En ese sentido, aún en el mismo nivel educativo, los venezolanos en Brasil tienen 64 % menos de probabilidades de obtener empleos que los brasileños.
Además, el estudio reveló que el 12 % de la población venezolana en edad productiva en Brasil tiene un empleo formal. Sin embargo, en comparación con la ciudadanía, reciben sueldos bajos y su estabilidad laboral es precaria.
Se estima que un aproximado de 260.000 venezolanos viven actualmente en Brasil, después de haber huido de la crisis económica, política y social. Si bien el marco jurídico es favorable, muchas de estas personas enfrentan barreras en el acceso a servicios sociales y al sistema educativo.