Venezuela debe pagar 1.600 millones de dólares a Exxon por expropiación
Hay temores en el mercado de que pueda caer en default ante los elevados compromisos internacionales
Con información de Reuters
El tribunal arbitral del Banco Mundial dictaminó el jueves que Venezuela deberá pagar a la petrolera estadounidense Exxon Mobil unos 1.600 millones de dólares en compensación por la nacionalización de sus activos.
La cantidad es ampliamente inferior a los 10.000 millones de dólares que la petrolera reclamaba inicialmente, aunque los árbitros que llevaban el caso ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi) ya habían limitado a 6.000 millones de dólares el monto máximo.
La indemnización es por la expropiación de los activos de Exxon en los campos Cerro Negro y La Ceiba y una cantidad adicional calculada por el tribunal por "recortes de producción y exportaciones", según la decisión del Ciadi.
En el 2007, Exxon llevó a Venezuela a ese tribunal de arbitraje exigiendo una indemnización por la toma de sus activos en la Faja del Orinoco.
En un arbitraje similar, la Cámara de Comercio Internacional (CCI) determinó a fines del 2011 que la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) debía pagarle a Exxon 908 millones de dólares.
Sin embargo, el Ciadi detalló el jueves que Exxon mostró su intención de evitar la "doble indemnización" por este caso, pero no especificó el monto que la petrolera estadounidense debe reembolsar a PDVSA por la anterior compensación.
"Venezuela salió muy bien parada en esta decisión", dijo el economista venezolano Asdrúbal Oliveros. "Es un monto que está por debajo de lo que esperaba cancelar al deducir lo que canceló PDVSA ante el otro tribunal (CCI)".
Exxon dijo que Venezuela no ofreció una compensación justa por los activos expropiados y que tuvo largas discusiones con PDVSA y el Gobierno, pero que no pudo llegar a un acuerdo.
El fallo llega en momentos en que Venezuela y PDVSA tienen que desembolsar, por pago de deuda e intereses, un promedio de 10.000 millones de dólares en los próximos tres años.
Si bien el martes Venezuela canceló unos 1.500 millones de dólares tras el vencimiento de un bono soberano, hay temores en el mercado de que pueda caer en default ante los elevados compromisos internacionales cuando la economía registra una fuerte desaceleración y el precio del barril de crudo cae sostenidamente.