Estudio revela que el 64% de la población cree que existen estrategias desinformación en Venezuela
En años recientes ha cambiado el patrón de consumo de noticias en Venezuela, donde los medios tradicionales se han visto disminuidos, producto de una política de Estado que ha generado miedo, censura y autocensura, coinciden expertos
Con información de VOA Noticias
CARACAS — El 64 % de la población en Venezuela considera que existen estrategias de desinformación y manipulación de las noticias, revela un estudio sobre acceso a la información en Venezuela elaborado por Equilibrium CenDE, un centro de investigación que analiza problemas en el ámbito social, económico y político en Venezuela y el resto de América latina.
La investigación expone que el 78 % de los consultados considera que el gobierno venezolano está detrás de esas estrategias; 35 % responsabiliza a la oposición venezolana y 29 % a China, Rusia y Cuba, gobiernos extranjeros aliados del oficialismo.
Algunos de los atributos considerados por las personas para evaluar la confiabilidad de un medio y protegerse de la desinformación son el respaldo con evidencia, la imparcialidad y la trayectoria, detalla Verónica Medina, coordinadora de investigación de Equilibrium CenDE.
El estudio elaborado en diciembre del año pasado y en el que participaron 1.275 personas, revela que el 76 % de los consultados no es capaz de mencionar el nombre específico de un medio que le genere confianza; el 61 % “no está fidelizado con algún medio en particular como para recordar su nombre de manera rápida” y el 15 % “no confía en ninguno”.
Se imponen las redes sociales
Medina afirma que los medios tradicionales han perdido “peso” en los últimos años y destaca la “preponderancia” de las redes sociales, entre ellas Instagram, Twitter y Tik Tok como medios de información.
“Vemos que cada vez medios como la radio, la televisión, la prensa han perdido espacio sobre todo en los segmentos más jóvenes. El auge de las redes hace que sea más fácil el acceso a la información, puedo ver allí los highlights de las noticias, esto ha cambiado bastante el patrón de consumo de noticias en los últimos años”, dijo la semana pasada al presentar la investigación.
Armando Hernández, un hombre joven consultado por la Voz de América en una calle del este de Caracas asegura que prácticamente no se informa a través de medios tradicionales y prefiere acudir a internet.
“Tiendo a buscar más informaciones por redes sociales, más que todo por internet, se me hace más cómodo ya que veo varios puntos de vista. Principalmente Twitter o algunas veces YouTube”, afirma.
Néstor Figueroa, otro consultado al azar, manifiesta que aún se informa a través de la radio, pero también utiliza constantemente las redes sociales.
Sin embargo, Ve sin Filtro, un programa de la organización Venezuela Inteligente, dedicado al monitoreo y documentación, con carácter técnico, de la censura en internet y otras amenazas al ejercicio de los derechos humanos, ha identificado decenas de páginas informativas bloqueadas a las que solo puede accederse mediante el uso de herramientas como VPN, lo que “limita” el ejercicio de DDHH en internet.
José Gregorio Yépez, director del portal Contrapunto, opina que el estudio permite, a quienes integran los medios, identificar los nuevos patrones de consumo de noticia.
“Lo que nos está planteando es un reto de buscar, redefinir nuestras estrategias para comunicarnos. Cuando vemos que la gente no menciona medios y nombra redes sociales, me viene a la reflexión que la gente está viendo en las redes un medio, pero quienes son los que llevan la noticia a las redes, las llevamos los medios. No lo discrimina como medio, sino que la plataforma termina siendo el medio”, manifiesta.
La investigación, además, resalta que las personas entre 40 y 60 años son quienes más consumen noticias que “contrasten con su forma de pensar” y en promedio son las que “más verifican la veracidad de las noticias que consumen”. Mientras que las personas mayores de 60 años, presentan “mayores dificultades” para verificar y comparar las fuentes.
También subraya que “las personas con mayor grado de instrucción son más propensas a utilizar algún método para verificar la veracidad de las noticias que consumen”.