Comunicado ABP Anzóategui ante la diatriba electoralista
Para que un proceso electoral sea legalmente válido y, además, creíbles y aceptables sus resultados, deben estar vigentes unos mínimos legales y constitucionales
Redacción
Los dirigentes del partido Alianza Bravo Pueblo (ABP) de Anzoátegui, emitieron un comunicado a la opinión pública, donde fijaron su posición respecto al tema electoral.
COMUNICADO ABP Anzóategui
A LA OPINIÓN PÚBLICA
Ante diatriba electoralista, pensamos que ésta debe ser abordada con la razón y con total responsabilidad.
Consideraciones de ABP Anzoátegui ante el falso dilema respecto a la participación electoral, en los actuales momentos.
Todo ciudadano que tiene vocación democrática, siempre será afecto a cualquier acto electoral constitucional. No obstante, hacemos una primera pregunta:
¿Estamos actualmente dentro del marco constitucional o algo cercano a éste?
Creemos que para que un proceso electoral sea legalmente válido y, además, creíbles y aceptables sus resultados, deben estar vigentes unos mínimos legales y constitucionales.
Una de las cosas que hemos repetido, hasta el cansancio, es que este régimen y, hoy, todas las ramas del poder que conformarían el "Estado Democrático", tal como lo consagra la Constitución, son ilegítimos de origen y por tanto de desempeño. Si defendemos esos conceptos, y así lo expresan igualmente la mayoría de los países democráticos: afirmando que el régimen no es legítimo, que el TSJ no es legítimo, que la Asamblea Nacional (AN) no es legítima, que el CNE no es legítimo; entonces: ¿puede ser legítimo, legal o constitucionalmente aceptable, un acto programado y tutelado por esos entes?
Nos preguntamos también: ¿Quién designará la nueva directiva del CNE?: ¡Una Asamblea Nacional írrita! ¿Quién “vigilará” y “pondrá orden” a la logística del proceso?: ¡Una Fuerza Armada corrupta y con parcialidad política! ¿Quién determinará si existen irregularidades o no, o decidirá sobre cualquier denuncia de fraude o problemas que puedan surgir?: Un TSJ ilegítimo, sesgado y entregado al PSUV!
¿Entonces, de qué estamos hablando?
No se nos puede tildar de antidemocráticos a quienes no deseamos participar en un "circo electoral", donde Maduro pone el libreto y, nosotros, los payasos: No podemos seguir dándole prevalencia a las ambiciones personales de algunos “políticos” oportunistas. Además, si en el mejor de los casos, nos ”regalaran” una gobernación, ¿quién va a regir? ¿No será acaso, un “protector”, nombrado a dedo por el Régimen? ¿A quién se le ocurre hablar de “referendo revocatorio?, cuando sólo se le puede revocar el mandato a un funcionario electo legalmente.
Alguien puede decirnos, ¿qué espacios vamos a defender: un cargo, unos salarios y un presupuesto de comiquita, para repartirse algunas migajas...?
En ABP Anzoátegui hemos analizado las interrogantes propuestas, una y otra vez, y una y otra vez, hemos llegado a las mismas conclusiones, por eso, esgrimimos la misma posición, porque no observamos que hayan cambiado las condiciones que nos llevan a ellas, como equipo serio e íntegro, defendemos la postura coherente y argumentada que le hemos manifestado a la comunidad política nacional.
¿Qué hacer al respecto?
Hemos planteado la revisión y reestructuración del equipo que acompaña a Juan Guaidó, como dirigencia opositora legitimada internacionalmente. Porque es innegable que se han cometido errores de manera sistemática y se han tomado malas decisiones, que no se quieren reconocer. Asimismo, es urgente y necesaria, de cara al país, una rendición de cuentas, como requisito indispensable de quien administra dinero y bienes de terceros, en este caso públicos.
La dirección de la oposición fue infiltrada, lo cual ha quedado demostrado con la desviación de algunos Diputados de la Asamblea Nacional y, porque, algunos personeros de la cúpula del G4, igualmente, se prestaron a usurpar las siglas de sus organizaciones políticas para ponerlas al servicio del sistema político socialista que sostiene a Nicolás Maduro, sumándose así, a aquellas que lo habían hecho previamente y se dieron a conocer como la inefable "mesita", esto lo sabe el pueblo y por ello exige depurar la dirección opositora.
Una vez resuelto este primer escollo, con la configuración real de una unidad de verdad, donde nos veamos y escuchemos todos los sectores nacionales, entonces debemos definir una única estrategia que debe ser discutida y dada a conocer a todos los venezolanos y países amigos que quieren ayudar a la solución del caso venezolano, para que rememos juntos en el mismo sentido.
En ese momento, podemos y debemos ponernos de acuerdo y luchar para exigir las condiciones mínimas indispensables para poder hablar de elecciones. Para ello, con el mundo de testigo y de cara al país, no a escondidas, se podrá hablar de negociación, y lo único que estimamos se debe negociar son las condiciones (depuración y actualización del rep, logística y totalización de resultados, seguridad personal de los electores, legalización de los partidos políticos , etc…) que garanticen la viabilidad y credibilidad (con participación y tutelaje internacional) de un proceso electoral presidencial, cuyos resultados sean reconocidos, y que destrabe la solución, aguas abajo, del resto de los problemas que nos aquejan. Las demás propuestas eleccionarias (regionales y otras) no tienen relevancia en este momento, por lo supra expuesto, y deberán ser posteriores al adecentamiento de las instituciones del Estado.
¿Qué podemos hacer, mientras?
Hacer labor ciudadana, ir a las comunidades, no a buscar votos, sino a llevar formación, organización, a hacerles entender que ellas no pueden arreglar el problema político nacional, pero que sí pueden hacer mucho por ellas mismas, si se ordenan, si se organizan. Hay que pacificar a las comunidades, contrarrestar la siembra de odios, hacerles comprender que allí, en el barrio, calle o vereda, por encima de la filiación política, de las discrepancias de credos y muchos otros factores diferenciadores “sembrados”, son VECINOS Y COMPATRIOTAS. Que existen muchos problemas y dificultades comunes, que pueden solventar juntos si se ponen de acuerdo, para beneficio de todos.
Que si se ordenan y se organizan, tienen poder para hacer y decidir, porque el poder está en la gente y no en los cargos: organizarnos y prepararnos para actuar.
Si ayudamos a la gente, la orientamos, si adecentamos las comunidades y las centramos en sus realidades, serán menos manipulables, en el futuro, y forjaremos ciudadanos con criterio, a la hora de decidir, en un verdadero y legítimo proceso electoral.
Si eres venezolano y quieres hacer algo, contribuye a un cambio positivo. Mira alrededor de tu casa, de tu calle, y ahí encontrarás un sinfín de tareas por hacer: Actívate. No esperes que venga nadie a decirte lo obvio. Dejemos atrás ese afán caudillista, cuasi genético. ¡No hay soluciones mesiánicas! Un país se construye con el concurso de todos.
Por tanto, a quienes han asumido y se han abrogado la responsabilidad de dirigir a la “oposición política”, les llamamos a qué por favor, hagan lo correcto y, de una vez por todas, les pedimos que olviden la “vieja manera de hacer política”, los afanes personales y pacten por un verdadero interés colectivo nacional, un trabajo por el bienestar común: Hablen claro y explíquenle a la gente la realidad que vivimos, estructuren un plan de acción concreto (interno y externo), definan estrategias, tareas y objetivos.
Avancemos en la dirección correcta. Llamemos a aquellos deslumbrados en su buena fe por el abismo electoral y entablemos una conversación franca con ellos. La unidad no es sólo de partidos y políticos, la unidad tiene que ser con las organizaciones civiles, gremios, sindicatos…, pero sobre todo con toda la gente, repetimos lo que hemos dicho tantas veces: Los partidos pueden y deben participar, pero no deben subrogarse la dirección de la Unidad Democrática, la Sociedad Civil merece un lugar preponderante en las mesas de negociación y las reuniones para decidir. Hacen falta los catedráticos, gerentes y expertos, para darle forma a ese plan, como quien quiere rescatar una gran empresa. No se puede tener temor de incorporar a los mejores ciudadanos con que el país cuenta.
En conclusión: ¡todos tenemos una tarea que hacer, sólo tenemos que decidirnos a hacerla, y hacerla bien¡
¡Dios bendiga a Venezuela!
Barcelona, 22 de abril de 2021
Por ABP Anzóategui;
Abg. Francisco Abad
Presidente
Ing. Antonio Clavier
Sec General
Lcdo. Benito Gómez
Sec de Organización
Soc. Elizabetta Di Nisia
Sec de Educación
Ing. Nelson Blanco
Coord de Empresarios
Sr. Edisson Hernández
Sec Sindical
Abg. Guillermo Irigoyen
Sec Juvenil
Abg. Nairobi Palacios
Sec de Profesionales
Abg. Belkis Chacón
Sec Femenina
Abg. Maribel Chacón
Sec de Acción Social
Lcdo. Domingo Sifontes
Coord de Planificación
Abg. Nyhurka Espinoza
Coord de Logística
Ing. Luis Silva
Coord de Movilización
Ing. Pablo Maza
Coord de Comunicación y Redes Sociales
Abg. José R Natera
Sec Político.