Pedro Galvis: La corrupción potencia la consolidación de regímenes antidemocráticos
“Venezuela es el quinto país más corrupto del mundo. Solo somos superados por Yemen, Siria, Somalia y Sudán. Nos hemos africanizado”
Nota de prensa
Lechería, 27.01.2021.- Pedro Galvis, líder del partido Vente Venezuela en el municipio Urbaneja del estado Anzoátegui analizó el reciente informe presentado por Transparencia Internacional, que ubica a Venezuela como el país con mayores niveles de corrupción del hemisferio americano, y el quinto del mundo. Señala que hay una relación directa entre la corrupción y la consolidación de sistemas antidemocráticos.
El coordinador del partido liberal en Lechería alega que inspirados en la doctrina socialista, movidos por sus pocos escrúpulos, y apoyados en la capacidad para ejercer violencia y perseguir a quienes disienten, el régimen ha convertido a Venezuela en un ecosistema criminal donde se comenten delitos de toda índole, razón por la cual no debería extrañarnos que la corrupción sea uno de ellos, sin embargo agrega Galvis, que este flagelo trae consigo consecuencias de alcance general. Argumenta que la corrupción generalizada contribuye a destruir la estabilidad de las naciones, agota los recursos de las naciones, arruina a las personas y empobrecer a la sociedad. “Maduro y su régimen han sido una eficiente fábrica de nuevos pobres, al punto que hoy más del 90% de los venezolanos padecen algún nivel de pobreza multidimensional”, dijo.
Galvis asegura que el régimen a través de la corrupción promovió la consolidación de un ecosistema criminal, que le ha resultado muy útil a sus planes de mantenerse en el poder indefinidamente, y nos recuerda como fueron penetrados muchos de los partidos políticos, para “cooptar a sus dirigentes y ponerlos al servicio de la tiranía”, quienes a su juicio “traicionaron los ideales que decían defender y el deseo de cambio de los millones de venezolanos que nos oponemos al sistema”.
Pedro Galvis nos indica, para validar su argumento, que Venezuela es el segundo país más opresivo del mundo, solo superado por Korea del Norte, de acuerdo al Índice del estado de la libertad mundial 2020, elaborado por el Profesor asociado de Instituto Militar de Virginia, J. Patrick Rhamey Jr. quien a los efectos del estudio establece una clasificación relativa de los países tomando en cuenta el grado de libertad (económica y social) del que disfruta el individuo promedio dentro de un determinado territorio.
Refuerza el dirigente del partido de la libertad, que otra referencia la podemos encontrar en el índice de libertad humana del 2020, presentado por Los Institutos CATO y Fraser, que ubica a nuestro país en el antepenúltimo lugar (160 de 162) del mundo entero, superados sólo por Sudán (161) y por Siria (162), respectivamente.
Galvis deja claro que la corrupción depende de dos partes, el corruptor y el corrompido; pero que adicionalmente requiere de un estado permisivo, con un sistema judicial debilitado que facilite la impunidad. Fue enfático al asegurar que, estos son indicios irrebatibles, de la relación directa de los efectos de la corrupción, con la perdida de libertades y la consolidación de regímenes antidemocráticos, razón por la cual resalta la importancia de sensibilizar a los ciudadanos en torno a la problemática de la corrupción y sus nefastas consecuencias, para la sociedad.
Finalmente resalta la importancia de abrazar las prácticas de transparencia y rendición de cuentas, por parte del liderazgo democrático, como un punto de partida para recuperar la confianza en los partidos políticos, en sus liderazgos y en la política, concluyó.