El Tribunal de Apelaciones de Barlovento dio luz verde al procedimiento, luego de que el supuesto testaferro de Nicolás Maduro fuera capturado el 13 de junio

Con información de EFE

El Tribunal de Apelaciones de Barlovento ha autorizado la extradición a Estados Unidos del empresario colombo-venezolano Álex Saab, supuesto testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. Su defensa, de la que forma parte el exjuez español Baltasar Garzón, considera que esta resolución judicial viola los derechos de Saab, al aprobar la deportación del empresario al «agente perseguidor por razones políticas, Estados Unidos».

Los letrados han declarado que esta decisión se adoptó el 31 de julio, pero no fue comunicada hasta cuatro días después, el 3 de agosto, por lo que han recordado que «Saab estaba esperando la fecha de la audiencia prescrita por la ley en la que ejercer, con igualdad de armas, su derecho a la defensa» ante el Tribunal de Barlovento, así que sus abogados consideran que esta resolución judicial viola sus derechos.

«El Tribunal de Barlovento ignoró el derecho del enviado especial Saab a un remedio efectivo y justificó erróneamente su desatención del documento de oposición de la defensa, declarando que la ley solo le permite revisar la solicitud de extradición por motivos limitados», han denunciado.

Álex Saab se enfrenta a la acusación por parte de la oposición venezolana de ser el encargado de gestionar el «dinero mal habido» de Maduro, supuestamente obtenido de actividades ilegales, así como de ser el «cerebro» de la operación Alacrán para arrebatar a Juan Guaidó la Presidencia de la Asamblea Nacional. Saab fue detenido el pasado 12 de junio en Cabo Verde.

Su defensa critica que la decisión de la extradición fue tomada por el Tribunal de manera arbitraria y sin sustento legal, aprobando así la extradición del acusado al «agente perseguidor por razones políticas, Estados Unidos». Por este motivo, consideran que esta sentencia no sigue el ordenamiento jurídico de Cabo Verde, ni el internacional, a lo que añaden que tampoco respeta el Derecho Humanitario y de los Derechos Humanos.

Además, acusa a la Justicia de Cabo Verde de prejuzgar y condenar «sin posibilidad de defensa alguna» a Saab, actuando así de manera «imparcial». En consecuencia, ha anunciado que apelará ante el Tribunal Supremo de Cabo Verde y, si tampoco prospera, «se presentará una solicitud de amparo ante el Tribunal Constitucional».

En cualquier caso, «el señor Saab se reserva las acciones judiciales locales e internacionales a que hubiere lugar para hacer efectivos sus derechos», ha aclarado.