Ella es Yelena Levchenko, la basketbolista bielorrusa detenida por el régimen de Aleksandr Lukashenlo
La atleta se opone abiertamente a al cuestionado presidente bielorruso y pasó 15 días de arresto por haber estado en dos manifestaciones en contra del mandatario, considerado como "el último dictador de Europa"
Juan Afonso/@jcabnews
En Bielorrusia, la represión contra los manifestantes ordenada por el cuestionado presidente Aleksandr Lukashenko, no distingue ningún nivel. Un ejemplo es la basketbolista Yelena Levchenko, quien formó parte de la WNBA y la Selección Nacional de ese país en la misma disciplina.
La atleta fue apresada por 15 días a modo de un arresto administrativo y recientemente fue liberada. Ella participó en dos manifestaciones pacíficas contra Lukashenko, acusado de cometer fraude en las elecciones presidenciales de ese país. Las protestas en las que estuvo fueron el 23 de agosto y 27 de septiembre, ambas realizadas en Minsk, capital del país.
Ella ya se había expresado contra el mandatario por manipular los resultados de aquella elección hecha el pasado 9 de agosto, y por la represión violenta contra los manifestantes. Levchenko se dirigía a París, Francia, para su rehabilitación, dos semanas antes, cuando la arrestaron en el aeropuerto. La enviaron al centro de reclusión de Okréstina, tristemente famoso por la situación de torturas a las que someten a los prisioneros allí, más que todo por causas políticas.
La propia Levchenco narró lo que vivió en esas dos semanas: “Han puesto en peligro mi salud. Me requisaron el colchón y las sábanas. No hay agua caliente. No me han permitido ducharme desde hace 13 días. Han bloqueado la cadena del inodoro. Esto es un nido de bacterias. Estuvieron cinco días sin sacarme a pasear. Tengo piojos. Todo esto daña mi salud".
Estas declaraciones las hizo en un juicio que se le efectuó el pasado jueves por haber participado en las manifestaciones, y le impusieron una multa en ese juzgado.
Otros atletas bielorrusos le mostraron respaldo por los vejámenes sufridos a manos del régimen, pero a la vez lamentan que ese apoyo no sea expresado públicamente porque todos le temen al gobierno y sus represalias.
También sucede que muchos deportistas bielorrusos de élite integran la KGB (policía de inteligencia bielorrusa, que aún conserva su nombre, como otras instituciones del país, del período soviético), del ejército o el ministerio de interior, lo que hace que muchos estén vigilados si se atreven a pronunciarse contra Lukashenko, que por años ha sido considerado como "el último dictador de Europa".
Y el encarcelamiento de Levchenko también se debe a que ella se opuso al decreto emitido por el ministro de Deportes de Bielorrusia, Serguéi Kovalchuk, en el que los deportistas están obligados a aprenderse el himno nacional del país, a no declarar a la prensa sin el permiso de sus clubes o federaciones. También les obligan a ondear la bandera verde y roja, prohibiéndoles levantar la bandera blanca con una línea roja en medio, que es usada por los opositores y la diáspora bielorrusa como señal de protesta contra ese régimen.
Levchenko denunció la presión psicológica que esto supone para todos los deportistas. “Según el artículo 33 de la Constitución, cada persona tiene libertad de opinión, convicción y expresión. Nadie puede ser obligado a expresar sus opiniones o renunciar a ellas. Es decir, ocurre que se viola la Constitución. ¿Cómo es posible?”, sentenció al tiempo que comparó la realidad del país con la de Norcorea.