“Hay contratos colectivos con 8 y hasta 10 años vencidos, no tienen seguridad social, prestaciones sociales”

Redacción

El coordinador sindical nacional de Un Nuevo Tiempo (UNT), Gabriel Vallenilla manifestó este miércoles en el marco del día del empleado público, su rechazo a las condiciones laborales en las que se encuentran los trabajadores venezolanos, producto de la mala administración del régimen en el sector público del país.

“Desde la coordinación nacional laboral de UNT, consideramos que definitivamente los trabajadores del sector público no tienen nada que celebrar, al igual que el sector laboral general del país, que sufre una hiperinflación que acabó con el salario, la contratación colectiva y la seguridad social del empleado público”, señaló.

Vallenilla aseveró a su vez que los trabajadores venezolanos tienen salarios de miseria,  pobreza extrema y no gozan de beneficios sociales, “hay contratos colectivos con 8 y hasta 10 años vencidos, no tienen seguridad social, prestaciones sociales. Tenemos el salario más bajo del mundo que equivale a 1,86 dólares, no alcanza para cubrir las necesidades básicas de una familia venezolana, comprar alimentos, medicinas, pagar el transporte público que aumenta cada día, aunado  a la escasez de efectivo”, sentenció.

Asimismo, resaltó que en el 2015 el Banco Mundial estableció que un ciudadano para salir de la pobreza y tener un desarrollo social digno debe percibir un sueldo de 1.95 dólares diarios, mientras que en Venezuela el salario mínimo es de 40.00 mil bs equivalente a 1.86 dólares mensuales. “Es decir, un trabajador en Venezuela trabaja para comprar medio cartón de huevo, por ello apuntamos que el salario mínimo que debe percibir un ciudadano es de 600 dólares mensuales, para poder cubrir la cesta básica familiar que redondea  los 4 millones de bolívares”, expuso.

Finalmente, el dirigente sindical aseguró que desde la coordinación sindical de la tolda azul seguirán trabajando por la reivindicación de los trabajadores, la unidad sindical y un sector laboral digno y representativo, “donde nuestros ciudadanos regresen al país que los vio nacer, con un gobierno que genere confianza y seguridad. Pronto tendremos un país libre, con salarios dignos y calidad de vida para todos los trabajadores”.