Pedro Galvis considera que el país ha sido sometido más por engaños que por la fuerza
El dirigente de Vente Venezuela en el estado Anzoátegui sostuvo que el esquema de cohabitación ha generado mucho sufrimiento en el país
Nota de prensa
(Lechería 06/12/2019) El dirigente del partido Vente Venezuela en el estado Anzoátegui, Pedro Galvis, lamentó que haya costado tanto al liderazgo político entender la necesidad de usar la fuerza para poner fin a la tragedia de los venezolanos.
Consideró que a los venezolanos nos han sometido más que por la fuerza, a través del engaño de supuestos opositores que implementaron un esquema de cohabitación, y se enriquecen a costa del dolor de la población, amparados en prácticas de corrupción.
Lamentó que un régimen de criminales corrupto y corruptor, haya logrado tentar a unos pocos diputados de la Asamblea Nacional, quienes mantienen la recurrente obsesión a ser candidatos, para ellos, las elecciones son un negocio, que ha atentado contra las posibilidades de lograr el cese de la usurpación.
Galvis dijo que por eso se afanan en apaciguar las iniciativas de fuerza internas y las externas, para combatir al régimen.
"Hoy los venezolanos empezamos a entender algunas posiciones que son indefendibles, hay gente que no tiene prisa en desmontar este sistema de mafias y de corrupción", enfatizó.
El líder del partido liberal afirmó que no tienen apuro en salir del régimen, porque la cohabitación es lucrativa para algunos, por eso se han negado a reconocer que para desalojar a los criminales que usurpan el poder es necesario hacer uso de todas las fuerzas, y contra esto los ciudadanos también debemos rebelarnos.
"La credibilidad de la Asamblea Nacional debe ser reconstruida, en el mejor interés nacional, por ello, es importante ampliar la comisión conformada para investigar a los diputados, para determinar las responsabilidades que de allí se deriven".
A su juicio, los ciudadanos debemos ser inclementes contra la asquerosa corrupción, y especialmente contra aquellos que se aprovechan de ella, mientras el país se cae a pedazos.
