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CEV, sobre hechos en El Helicoide: Delitos contra los derechos humanos no prescriben

La Conferencia se dirige específicamente a los miembros de cuerpos policiales que tiene a su cargo la guardia, custodia y administración de la sede del reclusorio

Con información de Noticiero Digital

La Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal Venezolana emitió este jueves en la madrugada un comunicado a propósito de los hechos registrados en El Helicoide. En el texto el clero le recuerda a los componentes del Estado que deben respetar la vida e integridad de los detenidos.

“Ante posibles situaciones que se puedan lamentar, queremos recordarle a los funcionarios policiales, que los delitos contra los derechos humanos no prescriben”, expresa el documento.

En el corto comunicado, la CEV se dirige específicamente a los miembros de cuerpos policiales que tiene a su cargo la guardia, custodia y administración de la sede del reclusorio lo que califican de “motín”.

“Al Estado su responsabilidad frente a la vida y a la integridad de todas las personas detenidas. Velar por los derechos humanos es obligación inexcusable e intransferible de los gobiernos, que no pueden estar subordinados a los hechos punibles que se persiguen”, abre el texto escrito como recordatorio.

El clero separa los papeles de Estado y Gobierno, y dirige un mensaje al Gobierno de Nicolás Maduro: “Escuche las peticiones de los detenidos, haga cumplir las órdenes de excarcelación, y mejore las condiciones de reclusión de los privados de libertad”, añade.

En el pronunciamiento también se dirigen al Fiscal General/ANC, Tarek William Saab: “A la Fiscalía General que vele por todos los detenidos; Menores, Mujeres y presos políticos e investigue las denuncias de torturas realizada por los familiares”.

El edicto concluye con una cita del artículo 10 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, tratado internacional adoptado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, vigente desde el 23 de marzo de 1976 y que fue suscrito por Venezuela: “Toda persona privada de libertad será tratada humanamente y será respetada su dignidad”.