Asesinaron a concejal que se oponía a intervención de Ejército en Brasil
En el ataque también murió el conductor de su vehículo mientras que una asesora de la política identificada como Fernanda Chaves sufrió heridas
Con información de EFE
La concejala brasileña Marielle Franco, del izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL) que se había convertido en una dura crítica de la intervención del Ejército en la seguridad de Río de Janeiro, Brasil, fue asesinada este miércoles a balazos en el centro de esa ciudad, informaron fuentes oficiales.
Franco, una conocida activista de los derechos humanos, fue tiroteada cuando transitaba en su vehículo por una calle del centro de la ciudad la noche de este miércoles tras haber participado en un acto político.
En el ataque también murió el conductor de su vehículo mientras que una asesora de la política identificada como Fernanda Chaves sufrió heridas.
La Policía Civil de Río de Janeiro informó que el ataque fue efectuado por pistoleros que estaban en otro vehículo y que dispararon indiscriminadamente sin hacer ninguna advertencia. Huyeron sin robar nada.
Pese a que los investigadores admitieron que no hay indicios de que se tratara de un asalto, hasta ahora no calificado el crimen como un atentado político.
El ataque se produjo un día después de que la concejala volviera a criticar la intervención en la seguridad de Río de Janeiro en un mensaje en las redes sociales.
"Otro homicidio de un joven que puede entrar en la cuenta de la Policía. Matheus Melo estaba saliendo de la iglesia ¿Cuántos más tienen que morir para que esta guerra acabe?", preguntó la política en un mensaje en el que reclamó la operación policial que terminó con la muerte del sujeto.
Franco, que se caracterizó en la carrera política por su trabajo en defensa de los derechos humanos, especialmente de las mujeres negras, ya había publicado otros mensajes en los que cuestionaba la violencia de la Policía en Río de Janeiro.
La legisladora, una socióloga de 38 años procedente del complejo de favelas de Maré, una de las áreas más violentas de Río de Janeiro, era la relatora de la comisión del Concejo creada para fiscalizar las operaciones policiales en el marco de la intervención militar.
El crimen ocurrió casi un mes después de que el presidente brasileño, Michel Temer, decretara una intervención federal en la seguridad de Río de Janeiro para combatir la ola de violencia que afecta al estado más emblemático de Brasil desde los Juegos Olímpicos de 2016.