En total se contabilizaron poco más de 50 ventanas informativas, entre nacionales e internacionales que han dejado de funcionar por obra del gobierno

Juan Afonso

El gobierno de Nicolás Maduro se ensañó seriamente con la prensa nacional e internacional en 2017. En todo ese año, poco más de 50 medios (entre emisoras radiales, periódicos y televisoras) fueron cerrados, sacados del aire o dejaron de circular.

Por el plano internacional, las cadenas CNN en Español y RCN fueron dadas de bajas de las señales venezolanas por orden de Conatel (Comisión Nacional de Telecomunicaciones).

En el caso de CNN, esto ocurrió a mediados de febrero, cuando en simultáneo, el gobierno estadounidense anunciaba que Tarek El Aissami, actual vicepresidente de la República, está siendo investigado por nexos con el narcotráfico internacional y además, la cadena sacó al aire un reportaje donde se denunciaba la emisión de pasaportes venezolanos a militantes de grupos irregulares islámicos.

En los medios nacionales, a mediados de agosto las emisoras 92.9 Tu Fm y 99.1 Mágica fueron cerradas la misma noche y desplazadas por Radio Corazón Llanero. Se expuso que Conatel no renovó las concesiones.

El diario Tal Cual sufrió varias mutaciones en el chavismo. Comenzaron siendo diario, luego por la crisis del papel pasaron a semanario y ahora, dejaron de circular para solo centrarse en su versión digital.

En Anzoátegui, uno de los medios con más trayectoria salió de circulación por las investigaciones de corrupción en la Faja del Orinoco. El empresario Carlos Urbano fue arrestado y la dirección del diario El Norte pasó a manos del Estado a finales de septiembre.

Agentes de la Dgcim (Dirección General de Contrainteligencia Militar) allanaron la sede del rotativo y sus periodistas y demás personal solo cumplían horario sin salir a la calle o devengar sueldo.

El diario comunitario El Mío (Editores Orientales), salió definitivamente de las calles el pasado 3 de noviembre, luego de siete años en la vida anzoatiguense. Su última edición incluyó una editorial donde describieron su situación y la explicación de sus salida, sin sutilezas.