​En Venezuela hay centenares de profesionales del derecho que han sido humillados y vejados ante la designación de magistrados no aptos para el cargo

Redacción ​

El diputado Carlos Berrizbeitía, presidente del Comité de Postulaciones Electorales, se muestra optimista ante la posibilidad de que se puedan designar nuevos Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia. Asegura que no es cuestión de optimismo engañoso o de fe sino de estar al lado de lo correcto y sobre todo de la ley, en consecuencia anunció, que antes del 12 de julio del presente año el país tendrá nuevos magistrados en la Sala Constitucional y la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia.

“Este Comité de Postulaciones, integrado por diputados y honorables miembros de la Sociedad Civil, apoyados en el Artículo 333 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el cual indica que todo ciudadano investido o no de autoridad, tiene el deber de colaborar en el restablecimiento de la efectiva vigencia de la Carta Magna, hemos acortado los tiempos para la designación de estos magistrados porque el país así lo reclama”, afirmó el parlamentario.

Berrizbeitía anunció, por ejemplo, que el próximo lunes 19 del presente mes será publicado en tres periódicos de circulación nacional el Cartel de Postulaciones para que los aspirantes a ser magistrados conozcan el lapso de tiempo de dicho proceso y dónde tienen que acudir para consignar la respectiva documentación. “Esta vez no será vía correo electrónico”, dijo.

“El proceso de postulaciones se prolongará por 5 días hábiles, los aspirantes deberán acudir personalmente a este Palacio Federal Legislativo, específicamente en la segunda vicepresidencia le serán recibidos los recaudos. Luego comenzará el lapso de entrevistas. Si tenemos que trabajar día y noche lo haremos”, preció el presidente del referido Comité de Postulaciones Judiciales.

Se conoció que el mencionado Cartel de Postulaciones y el Baremo serán publicados en las redes sociales de uso frecuente y en la Página Web de la Asamblea Nacional: www.asambleanacional.gob.ve

Los periodistas, insistieron en preguntar cuál sería la efectividad verdadera de este arduo trabajo. Recordaron que es harto conocido que los miembros del resto de los Poderes Públicos, especialmente del TSJ, desconocen la labor de los diputados y asegura que el Parlamento se encuentra en desacato. Ante las interrogantes el diputado Carlos Berrizbeitía respondió:

“La Fiscal general de la República está actuando apegada a la ley y está cumpliendo con su deber y nosotros, dentro de la Asamblea Nacional, estamos haciendo lo propio. Vamos anombrar a los magistrados y esos que hoy ocupan ilegalmente el cargo tendrán que abandonar sus funciones porque no cumplen los requisitos y fueron designados írritamente. Esos magistrados serán aún más ilegales después que la Asamblea Nacional juramente a los 13 principales y 21 suplentes que deberán ocupar los puestos de la Sala Constitucional y la Sala Electoral del máximo tribunal”, dijo.

¿No le parece un poco apresurado lo que está anunciando, además la designación de los magistrados pasa por la aprobación del Consejo Moral Republicano. Cómo va a hacer en este caso?, preguntó una periodista.

“No es una carrera contra el tiempo, ahora el apuro lo tiene el gobierno, tanto que inventó una Constituyente y pautó unas elecciones fraudulentas para el 30 de julio del presente año. Hemos recortado los lapsos, pero eso no quiere decir que estamos violentando el proceso. Sabemos que el Poder Moral está conformado por tres funcionarios, pero hay dos que no están cumpliendo con sus funciones. La Fiscal general es la garante de la legalidad del país y ante la crisis institucional que vive el país esas designaciones contarán solo con la concordancia de la doctora Ortega Díaz”, explicó el parlamentario.

Al abordar el tema del Baremo que contiene los requisitos para ser magistrado del máximo tribunal del país el diputado Carlos Berrizbeitía indica que por primera vez, en mucho tiempo, este documento será conocido por todos los venezolanos y venezolanas que muestren interés en el tema.

“Los requisitos son los más acordes en estos casos: profesionales del derechos probos, dignos, con estudios de pre y post grado, profesores universitarios, miembros de Organizaciones No Gubernamentales, de dilatada y reconocida trayectoria”, dijo Berrizbeitía luego de recordar que casi ninguno de los que hoy ocupa un sillón del TSJ tiene moral ni ética para estar allí sentado.

¿El TSJ ha anunciado la posibilidad de que la Fiscal genera sea sometida a un procedimiento penal por atacar a los magistrados. Usted no cree que a ustedes les va a suceder lo mismo?

“En Venezuela lo que existe es una neo-dictadura y de eso estamos muy conscientes. Si el presidente del TSJ cree que nos puede llevar presos, pues que lo haga. Si cree que puede llevarse presos a todos los venezolanos que actuamos amparados en la ley que vaya buscando los autobuses y los Guardias Nacionales que nos van a encarcelar. Basta de ser amedrentados. Repito, estamos actuando en nombre de la ley y el Artículo 333 de la Constitución nos obliga a tomar estas importantes decisiones”, respondió Berrizbeitía.

Llamado a salvar la República

Por su parte, el reconocido jurista Perkins Rocha, vicepresidente del Comité de Postulaciones Judiciales tomó la palabra para hacerles un llamado a todos los abogados probos del país. Agregó que en Venezuela hay centenares de profesionales del derecho que han sido humillados y vejados ante la designación de magistrados no aptos para el cargo.

“Este es un Comité de Postulaciones que le garantiza transparencia, seriedad y ética. El gremio de abogados es uno de los gremios que ha sido más golpeado y vejado por ese aparato burocrático del gobierno que se llama Tribunal Supremo de Justicia, por eso les hago un llamado republicano a postular su nombre para recatar la institucionalidad y la democracia en el país”, dijo Rocha.

De igual manera el profesional del derecho indicó que serán nombrados magistrados probos no solo para la transición sino para el rescate de la institucionalidad venezolana.