Antonio Ricóveri: a pesar de lo que digan algunos voceros del PSUV, hay tiempo suficiente para activar RR

Redacción

Por segunda semana consecutiva el pueblo de Anzoátegui salió a las calles a pedir que el CNE deje de poner trabas y retrasar el proceso de referendo revocatorio contra Nicolás Maduro, el alcalde de Lechería, Gustavo Marcano, aseguró que el Gobierno refleja un gran miedo a medirse con las acciones de represión y obstaculización contra las movilizaciones pacíficas.

“Cada piquete de la Guardia Nacional, esta gran y tecnológica barricada montada hoy para impedirnos el paso hacia el CNE, la represión en Caracas y otros estados del país lo que refleja es el gran miedo que tiene el oficialismo al revocatorio, ellos saben que están perdidos y que aquellos diez millones de los que tanto hablaban pudieran ser ahora para revocarlos del poder”, aseveró Marcano.

El dirigente Pedro Galvis, del partido Un Nuevo Tiempo señaló que el gobierno está realizando una apuesta tanto peligrosa como irresponsable, que podrían derivar en situaciones inconvenientes para la tranquilidad y paz de los venezolanos. Señala que queda en evidencia el carácter poco democrático del presidente Maduro, quien a su juicio, pretende contarse solo cuando es favorecido por los electores, apoyo con el que no cuenta en el presente, argumentó.

Por su parte el secretario regional de la MUD, Antonio Ricóveri, aseguró que,  a pesar de lo que digan algunos voceros del PSUV, sí hay tiempo suficiente para activar el mecanismo de cambio de Gobierno por vía electoral, pacífica y constitucional.

“Nosotros nos mantendremos en las calles junto al pueblo exigiendo lo que es un derecho consagrado en la Constitución, nos estamos pidiendo un favor, ni que nos regalen nada, ya deberíamos estar en el proceso de validación de firmas, queremos que el CNE deje de retrasar todo y entienda que el revocatorio es la única salida que existe para la grave crisis que vivimos”, fustigó Ricóveri.

Los dirigentes coincidieron en que seguirán las movilizaciones de calle de forma pacífica hasta que el ente comicial dé una respuesta concreta y active el Referéndum Revocatorio tal como lo establece la Constitución.