Cientos de animales han muerto debido a una mala alimentación o por ausencia de sutura o medicamentos

Con información de El Comercio

Escasez de alimentos y medicinas amenaza la vida de mascotas en Venezuela

Venezuela sigue atrayendo el interés de diversos medios internacionales, a consecuencia de los problemas que padecemos los ciudadanos en materia de escasez y desabastecimiento, que generan muchos inconvenientes para acceder incluso a los alimentos más básicos.

Estos inconvenientes traen daños colaterales que no suelen promocionarse internacionalmente, pero que son más que conocidos, las mascotas venezolanas, están viviendo un gran sufrimiento provocado por la escasez de los recursos más elementales.

El hecho de que en Venezuela haya escasez de muchos productos (los cuales ni siquiera se pueden comprar) está haciendo que muchas mascotas también deban ser desatendidas. No en vano, son cientos los animales que ya han muerto de inanición y debido a una mala alimentación. Por ejemplo, muchas personas están dando su propia comida a los animales, los cuales en ocasiones sufren enfermedades debido a que sus organismos no están adaptados.

Algunos de los comentarios que se esgrimen desde el país son ciertamente escalofriantes:

El inventario de productos para mascotas se encuentra en niveles muy bajos. La calidad de vida de algunos animales es inviable. Los veterinarios, ante la falta de medicinas, han limitado los productos que prescriben o directamente están haciendo uso de los que se recomiendan para los seres humanos.

Por otra parte, hay que mencionar que no hay anestésicos ni material de sutura, lo que significa que no se pueden llevar a cabo las operaciones quirúrgicas que en ocasiones son necesarias. Es evidente que el único destino de algunas mascotas es la muerte. También hacen falta las vacunas: las enfermedades hacen acto de aparición en cada esquina.

Venezuela se enfrenta a un panorama verdaderamente difícil. No solo para los animales, sino también para las personas. En el caso de que no se ponga en marcha algún tipo de medida, lo más seguro es que los seres que habitan en el lugar sigan pereciendo.