Hallan en Cumaná bacteria resistente a todos los antibióticos disponibles
“Escherichia coli (E. coli)” fue detectada en un humano y en un cerdo, siendo una bacteria panresistente en la microbiota intestinal
Nota de prensa
(PRENSA UDO/SUCRE.- (Alfremary Marval Ortiz / C.N.P: 13.908) Un estudio realizado en seres vivos de Cumaná, arrojó la existencia de una bacteria resistente a todos los antibióticos disponibles en el mercado, es decir, panresistente en la microbiota intestinal.
La investigación titulada: “Detección de Escherichia coli (E. coli) panresistente en la microbiota intestinal de seres vivos”, está a cargo de la Coordinadora del Laboratorio de Resistencia Bacteriana del Instituto de Investigaciones en Biomedicina y Ciencias Aplicadas de la Universidad de Oriente (IIBCAUDO), “Dra. Susan Tai”, doctora Lorena Abadía, conjuntamente con los investigadores: Bruno González Zorn (Director del Laboratorio de Veterinaria), José Francisco Delgado Blas y Cristina Ovejero, todos de la Universidad Complutense, de Madrid España.
El trabajo de campo se llevó a cabo en diferentes lugares de la primogénita, en agosto de 2015, con la recolección de 93 muestras de heces fecales, distribuidos de la siguiente forma: humanos (16), perros (8), cerdos (17) y aves (16), así como de aguas residuales (36).
“Los dos resultados positivos (2,1%), identificados como E. coli, son alarmantes en comparación con resultados internacionales, ya que se ha demostrado la presencia de este tipo de organismos de 0.5 a 1%. Estas fueron aisladas de muestras fecales de un hombre de 43 años y un cerdo, siendo 100% idénticas a una reportada en China en noviembre 2015, causando gran asombro, pues estos seres vivos, no han viajado ni han estado recibiendo tratamiento antibiótico, que origine la aparición de resistencia (…)”.
Resistencia a todos los antibióticos
Entre los aspectos que más sorprende al grupo de investigadores se destaca: la resistencia a la colistina (antibiótico usado como último recurso en pacientes críticos), siendo la primera detección en el país; el ser humano no tenía contacto directo con animales (ni con el cerdo en cuestión), que hayan sido tratados con colistina, ni había viajado recientemente a otros países; sólo un número muy pequeño de las muestras han sido probados y no hay declaraciones significativas con respecto a las vías de transmisión, es decir, no fue posible establecer el nexo entre el humano y el cerdo.
La doctora Abadía mostró preocupación ante la mezcla de la resistencia a la colistina y la existencia del gen blaNDM-1, que igualmente genera resistencia a todos los carbapenémicos, imposibilitando la acción de la familia de antibióticos betalactámicos.
“Esta sola bacteria contiene 28 genes de resistencia a los antibióticos, afectando varias familias de antibióticos como son: quinolonas, aminoglucósidos, trimetoprim-sulfametoxazol, tetraciclinas, etc. Esta combinación en un patógeno humano es preocupante, ya que impide el uso de la mayoría de los antibióticos de último recurso”.
Otro de los aspectos que genera gran inquietud, es que este mecanismo está alojado en un plásmido, “desde el punto de vista epidemiológico, su diseminación a otras bacterias es muy rápida, bajo la presión selectiva de los antibióticos, lo que quiere decir, que clínicamente todas las bacterias se pueden transformar altamente intratables a los antibacterianos disponibles”.
Existen estudios prospectivos para el 2050, de que morirán 392 mil personas sólo en América del Sur, a causa de infecciones producidas por bacterias multidrogo resistentes y a nivel mundial más de 10 millones de personas.
Recomendaciones
En este sentido, recomiendan los investigadores “el control de este nuevo gen, sus plataformas genéticas y las bacterias implicadas en su difusión. La colección de datos de vigilancia de los países en desarrollo, donde la información es escasa, como en Venezuela, es crucial a fin de establecer medidas precisas, pues con el tiempo se va a salvaguardar la eficacia de los últimos antibióticos complejos”.
“Es indispensable que la gente entienda que debe hacer un uso racional de los antibióticos, sólo exclusivamente cuando un médico lo recete y que se tenga una adherencia al tratamiento, pues esto genera que las bacterias existentes acumulen mecanismos de resistencia en el cuerpo (…)”.
Igualmente, para la doctora Abadía es esencial hacer un justo llamado a la reflexión a los productores de animales (cerdo, aves de corral y todo tipo de ganado), de consumo humano, para que disminuyan el uso de antibióticos durante el proceso de cría, ya que se están generando más bacterias resistentes en animales que en los ambientes hospitalarios a nivel mundial.
“Hay que recordar que la última familia de antibióticos descubierta fue en la década de los 90 del siglo pasado y actualmente, no se avizoran nuevas familias de antibióticos en el mercado farmacéutico, razón por la cual, se debe insistir en el uso racional de los antibióticos en todos los ámbitos, ya que está demostrado que en humanos se usan 7.7 millones de toneladas de antibióticos, mientras que en animales se usan 30 millones de toneladas, estos datos son a nivel mundial”.
Este estudio fue expuesto por la doctora Abadía, en calidad de seminario en el marco del “III Ciclo de Conferencias del Departamento de Biomedicinas 2016 del IIBCAUDO”, actividad coordinada por el doctor Edgar Marchán Marcano.