El Papa nombra a Baltazar Porras como Cardenal
Ademas del venezolano, El Papa nombró otros 12 nuevos cardenales de los cinco continentes
Con información de El País
“La procedencia de 11 naciones expresa la universalidad de la Iglesia”, ha explicado el Papa tras el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro, “que anuncia y da testimonio de la Misericordia de Dios en cada rincón de la tierra”. Destaca la presencia entre los nuevos nombramientos de tres cardenales estadounidenses, un brasileño Sérgio da Rocha, arzobispo de Brasilia, un mexicano Carlos Aguiar Retes, arzobispo de Tlanepantla y un venezolano Baltazar Enrique Porras, arzobispo de Mérida. Bergoglio también ha nombrado cardenales de la República Centroafricana, Bangladesh, islas Mauricio y Papúa Nueva Guinea. “La inclusión de nuevos cardenales en la diócesis de Roma”, ha añadido Francisco, “manifiesta la inseparable relación entre la sede de Pedro y las Iglesias particulares repartidas por el mundo”.
Otro de los datos que llama la atención de los nombramientos es que, entre los 13 nuevos cardenales electores, solo hay tres europeos. El español Carlos Osoro, el actual arzobispo de Bruselas, Jozef De Kesel y solo un italiano, Mario Zenari, que es y seguirá siendo nuncio apostólico en, según la expresión utilizada por el Papa, “la amada y martirizada Siria”. Entre los cuatro cardenales mayores de 80 años sí hay otro italiano, monseñor Renato Corti, arzobispo emérito de Novara, pero sin duda se trata de un saldo muy pobre teniendo en cuenta el poder casi hegemónico que la conferencia episcopal italiana había ejercido hasta ahora en la vida del Vaticano y, en especial, en la elección de los nuevos pontífices. Entre los cardenales eméritos, destaca un nombramiento. El de un sencillo sacerdote albanés llamado Ernest Simoni. Condenado a muerte durante la dictadura comunista, su testimonio conmovió al papaFrancisco durante visita a Albania en septiembre de 2014. Ahora, con 88 años, será cardenal.
Antes de hacer pública la lista, Jorge Mario Bergoglio reclamó durante el rezo del Ángelus la solidaridad mundial hacia Haití tras los estragos del huracán, y denunció la marginación en la que suelen vivir los migrantes, y advirtió: “Cuántos extranjeros, e incluso personas de otras religiones, nos dan ejemplo de valores que nosotros a veces olvidamos o descuidamos”.