Concejal guanteño denuncia a cementera por rehuir a debate sobre contaminación
Luis Gil, afirma que tanto el gobierno como la industria del cemento ubicada en Guanta, carecen de voluntad para frenar los daños ambientales que se han estado generando
Redacción
El concejal Luis Gil, denunció a la gerencia de Planta de Cementos Venezolanos en Pertigalete de rehuir al debate sobre la contaminación que se ha venido generando, y fustigó la suspensión de forma unilateral de una reunión solicitada por el Concejo Municipal para tratar el tema ambiental.
El munícipe expuso que cada día aumenta la gravedad del impacto ecológico y de salud pública, debido a las emanaciones de partículas de polvo provenientes de la industria cementera, lo cual se traduce en daños a la salud de decenas de miles de guanteños, amén de daños al ecosistema y afectación a la atmosfera.
“ Desde la primera sesión en la que participé como concejal en enero de 2014, y cumpliendo un compromiso asumido con nuestra Guanta, solicité un derecho de palabra para referirme a la contaminación atmosférica derivada del polvillo de Cemento que indiscriminadamente lanza al aire la planta de Pertigalete”, sostuvo para indicar que en aquella oportunidad propuso concretamente que se nombrara una comisión que asesorada por técnicos y expertos investigara la causa, diagnosticara el origen del problema y presentara una propuesta de solución.
Además, dijo haber sugerido que se gestionara ante los organismos competentes dichas soluciones, sin embargo, precisa que “ni el legislativo local, ni el ejecutivo municipal han hecho mayores esfuerzos para atender los infinitos requerimientos hechos”.
A su juicio, la Cementera se ha escudado para rehuir a un debate diáfano y claro sobre su acción como agente de contaminación en el municipio. “El problema se ha agravado. La contaminación ambiental generada por la Industria Cementera y la inoperatividad de las autoridades municipales, regionales y de la Dirección estadal de Ambiente para hacer cumplir las leyes ambientales y tratados internacionales rayan en la desidia y podría ser catalogada hasta de criminal”.
Recalcó que existen informes de 2014 y 2015 en relación al estado paupérrimo de las instalaciones cementeras.
“Visitamos la Planta en febrero 2014, fuimos al Ministerio del Ambiente y finalmente presentamos un informe donde se demostró y se reconoció que las instalaciones contaban con un sistema de electro-filtros obsoleto y deteriorado por la falta de mantenimiento y control de calidad, y que no cumplía con las Leyes ambientales.”
Precisa que por ello se establecieron sanciones de parte del Ministerio Ambiente, por lo que la empresa estatal asumió el compromiso de adelantar un proyecto de modernización que fue elaborado y que para ese momento tenía un costo de $ 160 millones.
Señala que el alcalde Marín, afirmó en una oportunidad que para este año se ejecutaría el proyecto de modernización de la planta a un costo de $ 300 millones, pero advierte que nada ha pasado, mientras el problema se agudiza.
“Poco o nada se ha hecho a pesar de que he insistido en la Cámara, donde estoy en absoluta minoría, en declaraciones públicas, asambleas de vecinos, visitas casa por casa, y reuniones con Consejos Comunales, he llevado el mensaje para que el Gobierno ejecute ese proyecto, pero pareciera que no existe una voluntad por parte de la alcaldía, entes ministeriales y mucho menos de la industria Cementera para frenar la crisis de salud y ambiental que se vive en la localidad”.