Amas de casa barcelonesas hacen magia para rendir el presupuesto familiar
La intermitencia con la que aparecen los productos alimenticios y de higiene personal impide que haya control del gasto
Niurka Franco
La escasez de los productos alimenticios y de limpieza, ha generado un caos entre las amas de casa que se ven obligadas a hacer verdaderos milagros no sólo para rendir el presupuesto familiar, sino para que el gasto pueda ser equitativo y alcance para cubrir todas las necesidades del grupo familiar.
“La desaparición de los productos de higiene personal causa estragos”, refiere el ama de casa Maria Cedeño, quien señala que salió a comprar charcutería, víveres y legumbres, pero terminó gastando el dinero en papel higiénico, detergente, desodorante y jabón de bañó”.
Y es que la intermitencia con la que aparecen y desaparecen los referidos productos, las encargadas de estirar el presupuesto del hogar, terminan comprando más cantidad de lo que normalmente adquieren para quince días, ante el temor de que desaparezcan nuevamente.
“Es horrible vivir en esta incertidumbre, confiesa Amarilis López, quien asevera que debió recurrir a un desconocido para que le comprara dos unidades de desodorante en barra y poder superar de esta manera el límite de compra del establecimiento. “No nos gusta ese desodorante de bolita que está por todas partes, ahora que encontré otro tipo, quise llevar por lo menos cuatro porque quién sabe cuándo lo vuelvo a ver”.
Un recorrido por distintos automercados, tanto de Barcelona, como de Lechería, permitió obtener las mismas reacciones aunque de distintas jefas de hogar. “Prácticamente nos hemos vuelto almacenadoras de los productos alimenticios y de higiene personal, porque ya sabemos la mortificación por la que pasamos cuando algo tan esencial como es el jabón de baño, no falta en casa”.
Las amas de casa coincidieron al referir que hacer el mercado ya dejó de ser una actividad agradable para convertirse en un dolor de cabeza. ”Hay que estar con una calculadora en mano sacando cuentas para no exceder del monto disponible y encima saber qué dejar en la caja en caso de que el dinero no alcance”. Comenta Rosa Gutiérrez-
Mínimo seis salarios
Adquirir la cesta básica pasó a ser un sueño inalcanzable para la mayoría de las familias anzoatiguenses, pues su costo asciende a 25 mil bolívares. De acuerdo con estimaciones del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas), una familia de cuatr